[:es]El fútbol profesional da pasos hacia la vuelta a la competición, aunque todavía lejana y llena de incertidumbres. ¿Cómo se vive el proceso de aclimatación? Dos jugadores Emartsoccer, el capitán del CD Mirandés, Gorka Kijera, y uno de sus jugadores más regulares en lo que llevamos de campaña, el central Odei Onaindia, nos cuentan sus primeras sensaciones en la vuelta al trabajo y analizan el hecho de poder volver a competir, por ejemplo, sin el factor Anduva a sus espaldas.
El capitán dice que ha sido “curiosa la manera de volver a entrenar, por la manera en la que empezamos, individualmente, nunca lo habíamos vivido, aunque era la más segura para evitar contagios”, punto este último en el que incide Odei: “Teníamos ganas de volver a entrenar, pero con un protocolo que nos garantizara en todo momento la seguridad de los jugadores, cuerpo técnico, trabajadores y, como no, de familiares. Lo principal es la salud”.
Casi dos meses en casa, sin correr y sin esférico, trabajando en solitario, han dado paso a “sprintes largos, tocar balón, sensaciones diferentes”, apunta Kijera y Onaindia recalca que “veníamos de un confinamiento donde muchos, incluido yo, no hemos podido trotar, ni hacer sprintes. Por eso el ser individualizado, no cambiaba mucho de lo que haríamos al principio en grupo”. Eso sí, estaban deseando entrenar juntos: “Es un ambiente que mezcla la ilusión y las ganas por volver al campo a entrenar y luego a competir”.
Hablando de campos, “This is Anduva”, un prestigio forjado a fuego lento. Un campo que, como señala Gorka, “tiene una magia especial y que, en estado puro, el equipo lo nota. A todos nos va a afectar el jugar sin público y no vamos a ser una excepción. La gente cuando viene aquí sabe que es importante”. Odei incide en ello: “para nosotros Anduva siempre ha sido un fortín,. Ha sido muy difícil batirnos aquí, pero sin público hará que todo se equilibre más. Aun así, siempre conoces más el estado del césped de tu estadio que los demás” y el capitán avisa entre risas: “son cosas de la nueva situación, tendremos que taparlas con otros factores que tiene Anduva y los rivales no conocen”. A juicio de Onaindia, “creo que va a tener un plus el equipo que tenga más fondo de armario, ya que tendremos que jugar cada tres o cuatro días y eso hará que toda la plantilla sea necesaria e importante”.
En el fondo subyace un deseo común, el que refleja Gorka Kijera: “Esperemos que nosotros en el fútbol retomemos dinámicas de la mano de la sociedad en la calle, para que cuanto antes lleguemos a lo que llaman nueva normalidad y que se refleje en lo cotidiano, en estar más tranquilos respecto a nuestra salud y a gestos que parecen pequeños pero son importantes, como no estar pendientes de coger hora para comprar o esperando fuera… Está en manos de todos dar el último empujón”… sin que nos saquen cartulina amarilla, utilizando el símil futbolístico.
Y ahí siguen, entrenando con la ilusión de una pretemporada a finales de liga. Ninguno de los dos habla de su futuro, cada uno desde su rol, experimentado capitán el lateral zurdo y central “de moda” el jugador de Ondarroa. Vistos los acontecimientos, quizá hasta sea mejor, porque ahora el futuro se escribe día a día.
(Imagen de portada: Luis María Unciti-MUNDO DEPORTIVO)
https://www.linkedin.com/in/emartsoccer/
